“La guerra de seis a ocho” es una crónica que Tomás Eloy Martínez publicó originalmente en el diario La Nación en 2003, escrita durante los años que vivió en Nueva Jersey. Allí registra el modo en que guerra de Irak pasa casi completamente desapercibida para los ciudadanos de Estados Unidos. “Las imágenes de la matanza en Irak y de las tormentas de arena roja del desierto asoman en los bares y en los gimnasios del país invasor como un reality show que los espectadores se disponen a ver de 6 a 8, antes de la comida o durante. La tragedia casi no se advierte en las conversaciones entre vecinos ni afecta la vida cotidiana: es un fenómeno que existe sólo en los medios, algo remoto, ilusorio, que no le impide al mundo seguir siendo como ya era”, escribe TEM. También relata una caminata por Manhattan junto a dos profesores de Rutgers –una de las universidades donde fue docente- mientras la tercera división de infantería está ocupando el aeropuerto de Bagdad: “Yo les había contado que en Buenos Aires o Córdoba, cada vez que sucede algún hecho que afecta los sentimientos de la comunidad entera -los cacerolazos de diciembre de 2001, las alzas y bajas del dólar, la desocupación, los secuestros exprés, los recortes de salarios-, la gente habla obsesivamente de lo mismo, cualquiera que sea el sector social al que pertenece. En toda esa larga travesía por Manhattan, en cambio, no oímos mencionar la guerra ni una sola vez”.

Este texto forma parte de Crónica narrativa. Qué es y cómo se escribe, de Nerio Tello. Editado por Ciccus, se trata de un libro que aborda este género desde una perspectiva teórica e histórica (con un fuerte anclaje en la tradición latinoamericana del periodismo narrativo) y que además, incluye textos periodísticos argentinos escritos desde comienzos del el siglo XX hasta nuestros días.

“El libro está destinado a alumnos de carreras de comunicación, periodismo y afines, interesados conocer y desarrollarse en el género. Si bien se mencionan otros autores (por ejemplo Mansilla o Francisco Moreno o algunos viajeros), los textos elegidos se conocieron a través de publicaciones periódicas y se ajustan al criterio de ser materiales periodísticos”, explica este periodista, escritor y docente universitario en diálogo con Fundación TEM.

En cuanto al recorrido teórico, Tello establece algunos parámetros para pensar en qué consiste el periodismo narrativo; rescata la escuela norteamericana con autores como Tom Wolfe, Gay Talese y Henry Miller y también, cronistas en lengua española desde Gabriel García Márquez hasta Caparrós y, claro, TEM. A partir de allí, finalmente, propone un recorrido por crónicas locales que se destacan en el panorama continental.

“Más allá de mis pretensiones de sistematizar este algo llamado crónica narrativa, de lo que se dice acerca de ella, de lo que se escribió y se escribe y sobre lo que se habla y se opina y nunca nos ponemos de acuerdo, mi idea central fue diseñar un mapa conceptual para las decenas de alumnos que cada año se interesan en este tema”, dice.

“Hay autores de varias generaciones empezando por Roberto Arlt. Luego dos cronistas fundamentales entre los años 60 y 70 como Rodolfo Walsh y Tomás Eloy Martínez. De allí salto a la nueva generación de cronistas ya consagrados (María Moreno, Leila Guerriero, Cristian Alarcón y Josefina Licitra) y dos cronistas de la nueva camada (menos de 40 años) como Cicco y Javier Sinay. Un capítulo del libro se refiere además a los nuevos lenguajes que aborda el cronista del siglo XXI. En todos los casos he tratado de publicar materiales que no fueron publicados en formato de libros”, agrega Tello.

“En el libro hay varias menciones a TEM, por que fue uno de los autores que más reflexionó sobre el género, junto a Martín Caparrós”, afirma. Y subraya que “La guerra de seis a ocho” es un material “diferente a los otros, donde además de la calidad narrativa surge el tema de las noticias (la guerra en este caso) y el nulo impacto en la sociedad estadounidense”.

 

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