Cómo trabajaba el escritor y periodista: este mediodía se inaugura en el Centro Cultural San Martín una muestra de objetos y manuscritos que revela la trastienda de su obra.

Hoy, cuando se inaugure la muestra Cuatro Mil Verdades, la sala E del Centro Cultural San Martín será invadida por la sonrisa serena y la mirada cuestionadora de Tomás Eloy Martínez. Quienes se atengan a la imagen reproducida en las fotografías recordarán la apariencia real del periodista y escritor, que murió hace ya cinco años. Y los que cedan a la figura que vaya moldeando en su imaginación el conocimiento de las herramientas con las que trabajaba -su máquina de escribir, su grabador, sus libretitas de anotaciones- se aproximarán al alma de un hombre de cuya existencia no tendrán certeza.

¿Cuál fue el verdadero Tomás Eloy Martínez? ¿El periodista que investigaba y denunciaba con rigurosidad obsesiva el caso real? ¿O el escritor que inventaba y callaba para que hablara la fantasía?

La muestra se enfoca en el desdibujado límite entre ficción y realidad que caracteriza la obra de Martínez y propone un paseo imaginario por su cocina narrativa. Se inaugura un día 16, así como un 16 (pero de julio), se inició la vida del mismo Martínez en 1934. Y fue motivada por una conjunción de factores: el deseo de homenajear de alguna forma al autor, que la directora del Centro Cultural San Martín, Gabriela Ricardes, venía postergando; el aniversario redondo de dos de sus novelas más exitosas y la reedición de ambos títulos (Alfaguara), enriquecidas con los apuntes del escritor durante su tarea y otros materiales.

PERÓN, PERÓN

La novela de Perón, el libro en el que Martínez cuenta mucho más que la vida de un militar que generó un movimiento político, cumple treinta años desde su primera publicación. Y Santa Evita, en la que describe el derrotero del cadáver de quien fue algo más que la segunda esposa de aquél, celebra dos décadas exactas también desde que salió de imprenta. La primera se tradujo a seis idiomas y llevaría vendidos unos cien mil volúmenes; la segunda, se llevó a unas treinta lenguas, y alcanzó el medio millón de unidades.

“Alfaguara hizo dos ediciones conmemorativas que incluyen manuscritos corregidos de esas novelas, correspondencia y otros documentos vinculados con la trastienda, con la hechura de esos textos y con las obsesiones que él tenía”, dijo a la nacion Ezequiel Martínez, el mayor de los siete hijos del escritor y su albacea.

Las “obsesiones” de su padre se dejan ver en los apuntes sobre consultas médicas, tachaduras y comentarios que hacía mientras escribía una novela. “Trataba de conocer cualquier tema en profundidad por más que después en el libro apareciera una sola línea sobre eso”, sigue Ezequiel, quien preside la Fundación TEM, y junto con Mariano Soto y Maximiliano Tomas, es curador de la muestra en el San Martín. “¿El formol desnaturaliza el ADN?”, “¿El lugar ideal es la pulpa dental para el ADN (de los dientes o del pelo)?” son algunas de las preguntas que Tomás Eloy formuló al médico especialista en genética humana Víctor Penchaszadeh en relación con el proceso de embalsamamiento de los cuerpos que, manuscritas, se reproducen en el anexo documental deSanta Evita. Allí también se puede leer una carta que en 1970 el escritor envió al director de la revista Panorama sobre sus averiguaciones e hipótesis acerca del paradero del cuerpo de Eva Perón en Bonn.

En el anexo de La novela de Perón, se transcriben varios documentos, entre ellos, un croquis con los datos sobre los sucesos en Ezeiza en paralelo con lo que ocurría en el avión el 20 de junio de 1955 mientras regresaba al país. También hay reflexiones sobre el libro, entre las que comenta la última vez que vio a Perón, en 1972. Martínez afirma que el militar y político le dijo: “?ya verá cómo usted y yo nos encontraremos siempre, mientras estemos en el purgatorio”. Y agrega Martínez: “Eso era Perón: el purgatorio, el camino del medio. Todos los caminos. Lo que también puede decir: ningún camino”.

Mariano Soto advirtió en diálogo con la nacion que la muestra no tiene una intención política. “No toma partido a favor o en contra del peronismo, pero sí tiene una posición historicista y sociológica. Mostramos una manera de ver las cosas que genera diferentes cosmovisiones.”

Quien visite la exposición, que permanecerá abierta con acceso gratuito hasta el 28 de junio, conocerá, entre otras cosas, el escritorio de estilo francés que usó Martínez apenas regresó al país, luego de vivir en los Estados Unidos, la máquina de escribir Underwood con la que escribióLa Pasión según Trelew, el grabador con el que entrevistó durante cuatro jornadas a Perón en Puerta de Hierro (Madrid) y escuchará fragmentos de esa entrevista. También se podrán oír las explicaciones que Tomás Eloy dio en una clase magistral en la Universidad de Rutge, Estados Unidos. “Ese audio fue acercado recientemente a la Fundación por uno de los ex alumnos de esa universidad. Es impresionante porque todo el tiempo están apareciendo nuevos y valiosos materiales”, cuenta Victoria Rodríguez Lacrout, directora ejecutiva de la Fundación TEM, que organiza la muestra junto con el San Martín.

En la sección multimedia hay fragmentos del video inédito de la presentación de Santa Evita, en 1995, en el Centro de Cooperación Iberoamericana donde habla el autor y su editor Juan Forn, testigo del proceso de escritura y publicación de esa novela que en un primer momento Martínez quiso llamar La perdida.

La ambivalencia y las múltiples lecturas que pueden hacerse de la realidad sobrevuelan toda la obra de Martínez y se evidencian en el título de la muestra, inspirado en una pregunta que el autor le hace decir en su novela a la abuela de Perón: “Juan, me decía: ¿qué ve una mosca? ¿Ve cuatro mil verdades o una verdad partida en cuatro mil pedazos?”.

EDICIONES CONMEMORATIVAS

La reedición de sus novelas, que cumplen 30 y 20 años, se presentan en un Homenaje a Tomás Eloy Martínez, el 10 de mayo, a las 20.30, en la Feria del Libro. Con Jorge Fernández Díaz, Pacho O’Donnell, Juan Ignacio Boido y Ezequiel Martínez.

Por: Silvina Premat

Medio: La Nación

Fecha: 16 de abril de 2015

Ir al artículo

Deja una respuesta